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Fuera de Serie: "Donde hubo fuego", por Valeria Garcilazo

José Ignacio Valenzuela, el guionista y escritor chileno, vuelve a aparecer en Netflix con una nueva serie: Donde hubo fuego. En mi opinión, se trata de un híbrido entre serie de televisión y telenovela mexicana, lo cual es un movimiento arriesgado. Sin embargo, conocido también como 'Chascas' y por su reciente éxito en la misma plataforma digital ¿Quién mató a Sara?, Valenzuela lo conjuga con total éxito en este título estrenado el pasado 17 de agosto que ofrece no sólo drama sino también amor, suspense y acción.


La producción cuenta la historia de Poncho, protagonizado por Iván Amozurrutia, quien se infiltra dentro de un cuartel de bomberos de la ciudad de México para dar con el asesino de su hermano. Poncho iba en busca de una sola respuesta, pero, a medida que pasa más tiempo dentro del equipo, va descubriendo cosas que no sabía sobre su vida y encuentra respuestas, romance, familiares perdidos y a una asesino en serie. Donde hubo fuego supera los estereotipos de telenovela mexicana, pues no sólo ofrece drama, sino también acción de calidad. Es importante destacar que, para tratarse del mencionado formato, la trama se desarrolla rápidamente, lo que representa una inteligente táctica por parte del guionista para adaptarse al público actual.


La serie se divide en 39 episodios de unos 40 minutos cada uno. Valenzuela no es de hacer miniseries, un riesgo en la actualidad teniendo en cuenta que los espectadores optan cada vez más por formatos cortos de una sola temporada con capítulos de no más de 30 minutos. A pesar de esto, la fórmula ha funcionado hasta el momento. Donde hubo fuego es compleja y diferente al mismo tiempo, dejando atrás conocidos estereotipos. El elenco hizo, además, un trabajo correcto al mezclar, de manera adecuada, las interpretaciones melodramáticas y de suspense características de las telenovelas. Valenzuela nos demuestra lo que es crear una producción de calidad, llena de actuaciones y situaciones impresionantes, pero siempre bien fundamentadas.


Donde hubo fuego es de esas series que puedes ver de corrido por un día entero. Desde el primer momento, el espectador se enfrenta a múltiples giros inesperados. Además, cada situación y personaje están interconectados inteligentemente. Las acciones dramáticas se encuentran, al mismo tiempo, acompañadas de una palpitante música que aporta dramatismo e interés a la historia. El final, sobre el cual no hablaré para no hacer spoilers, ha dejado bastante incertidumbre entre los espectadores y ha sembrado la duda en torno a si habrá una segunda temporada. Hasta la fecha, ni Netflix ni Valenzuala han confirmado ni negado nada al respecto.