Que sí, cansin@s! Lobezno sale, o no. Qué más da! Que os follen! Chuparos los créditos hasta el ojal y cuidado con sus desgarros! Si bien la primera parte nos planteaba ciertas reservas para visionar esta segunda entrega de las andanzas cinematográficas del personaje de Wade Wilson (para unos), Deadpool/Masacre para otros, Deadpool 2 parece que la tiene más larga y dura, la pone sobre el suelo, la menea por doquier y la mete en cualquier agujero.
El Ryan Reynolds de cuero rojo y negro, que sigue luciendo a gala de linterna verde meterse con uno mismo y vuelve a volarle los sesos a su alter ego real, saca a pasear la porra y el resto de su arsenal con mayor frecuencia y condición explícita, de hecho gatea hilarante sobre sus extremidades inferiores desmembradas cual escualo panza arriba y alimenta su bibujarrismo oral a cada secuencia.
Deslenguado y viperino, el mercenario bocazas de Marvel escupe cera y da cera a los suyos y ajenos, cuestión de izquierdos y derechos, hasta el punto de que Stan Lee se deja caer como quien no pinta la cosa por una fachada como testigo, pero también le mete estopa de ida y vuelta a la pederastia y los abusos sexuales aplaudiendo el ansía vampírica de la tierna juventud.
Para la ocasión, y bajo la dirección de un David Leitch (Atómica) que lleva la franquicia más allá de sus propios restos, Deadpool 2 se encuentra con un antagonista de altura, Josh 'Cable' Brolin, un sicario metido a Terminator en busca de un niño mutante con ganas de liarla parda, mientras intenta atravesar el techo de cristal para comerle los morros a su Morena 'Ness' Baccarin.
Toda esta sinvergonzonería a cascoporro, además, se acompaña de una especie de soldados de fortuna, con especial atención a una Zazie 'Domino(trix)' Beetz que se merece por sus suertes rotundas un propio 'spin off' y a un Brad Pitt caído en desgracia -taxistas aparte-, y una banda sonora tan hilarante como encajable cual Lego que va desde Barbra Streisand, Celine Dion, Enya, Cher o A-Ha a Queen o AC/DC.
Cine de acción y superhéroes, con el plan B de los X(Wo)Men, que se bebe un Juggernaut y sale pedo, y cuidado porque te abordan desde la retaguardia. Para aquell@s que pensaban que enumerar las referencias de Ready Player One era una misión imposible, Deadpool 2 asalta la banca y destaca por el ilimitado cargador de balas en la recámara que tirotea entre plano y plano.