script

Crítica: "Loreak (Flores)", por Javier Collantes

Representando a España en la carrera por el Oscar a la Mejor Película de Habla No Inglesa, los dos directores de este relato cinematográfico, Jon Garaño y José Mari Goenaga, conducen una historia intensa, demoledora, un McGuffin tan presente como revelador. Este film reta al relato convencional con elogiosa exactitud en sus contornos: tan apasionantes como fríos, tan cercanos como reales.


Así pues, no es de extrañar su éxito en festivales, como en Palm Springs, lo que abre una puerta en su nuevo reto. "Loreak (Flores)" narra pedazos de historias entre tres mujeres, un hombre, un ramo de flores, una curva de carretera, un accidente, un impacto, un recuerdo, el olvido, la memoria, la pasión y una forma de enfrentarse a la muerte. Un ramo anónimo, componente cruel y doloroso, trozo de vida, amor y muerte. Esta película es una bocanada certera de aire fresco, una clase de cine majestuoso y significativo, una combinación de historias que se cruzarán con el perdón y la comprensión. 


En un sentido humanista, una forma inolvidable de representar algo tan sustancial como la vida humana y sus miserias. Desde muchos ángulos, "Loreak (Flores)" recorre sensaciones y emociones, pero, en clave cinematográfica, resulta una estructura de guión de excelencia definitoria, sin concesiones y con cavidades, de carne y hueso. Desde las ausencias y la recomposición, simplemente extraordinaria.