El pasado 17 de Noviembre se daba por concluida la octava edición del Festival Internacional de Cine de Roma, o, como se suele llamar, el Festival Internazionale del Film di Roma. Aún cuando se trata de un evento bastante joven, cada vez consigue suscitar más interés entre el público, ayudando así a promover y reafirmar su éxito. Seguramente no es histórico como el de Venecia, y tampoco tan glamuroso como el de Cannes, pero, poco a poco, se está abriendo y ganando espacio en el panorama internacional de importantes acontecimientos cinematográficos.
Este año se batió el record de entradas vendidas, como confirmación de que al público gusta y responde con entusiasmo y participación a este suceso. El Marc’Aurelio de Oro, premio del VIII Festival de Roma, ha ido a "Tir", de Alberto Fasulo, que supo conquistar al jurado con una película italiana, montada como un documental, que narra la vida cotidiana de un conductor de camión, proveniente de los Balcanes, y donde cultura y respeto del protagonista contrastan con las rudas costumbres de sus nuevos colegas camioneros, dando la vuelta así a la célebre cita 'el trabajo dignifica al hombre'.
Entre los otros homenajeados encontramos a Kiyoshi Kurosawa, que ganó los Premios a la Mejor Dirección y Mejor Realización con "Código Séptimo", uno de los más premiados durante la ceremonia. El Premio Especial del Jurado recayó en "Quod erat demonstrandum", del director rumano Andrei Gruzniczki, que cuenta las consecuencias surgidas por publicar un artículo matemático durante la época del comunista Nicolas Ceacescu, a mediados de los ’80. El Premio como Mejor Actor, junto con el Premio BNL del Público, fueron para Matthew McConaughey, por la película "Dallas Buyers Club", en la que el actor interpreta a Ron Woodroof, un texano enfermo de SIDA y homofóbico que se hace amigo de un transexual que difunde ilegalmente curas alternativas a la enfermedad. Scarlett Johansson ha ganado el Premio como Mejor Actriz por "Her", en la que da voz a un ordenador del que se enamora el protagonista, Joaquín Phoenix.
El Premio al Mejor Joven Actor o Actriz va a todo el reparto de la película iraní "Gass/Acrid", una historia coral que narra las vidas de diversas parejas con problemas de infidelidades y conflictos matrimoniales en un país tan religioso como Irán. Una mención especial por parte del jurado internacional fue entregada a Jian Cui, por "Lanse Gutou/Blue Sky Bones", en la que es posible conocer la biografía de una de las más importantes estrellas veteranas del rock chino que quiso demostrar con este trabajo que no solo de la música se puede pasar al cine sino que la música china puede saltar a Europa sin ningún problema.
Mientras que la décima edición de la sección paralela dedicada a los niños y las familias ha dado como ganadora a "Alicia en la ciudad", con el triunfo de Finlandia, que ganó dos premios a la mejor película, este certamen se despidió con una serie de encuentros entre el público y algunos de los actores y directores que han participado en el evento, como Angela Finocchiaro y Checco Zalone. Lo que se deduce de este nuevo quermés cinematográfico es que, a pesar de las dificultades e inconvenientes que este año ha caracterizado la organización del evento -como pueden ser el importante recorte presupuestario, la presencia de estrellas que se hace más dificultosa (sobre todo si ni siquiera tienen la paciencia o el tiempo de quedarse para recoger el premio), la controversia polémica que ha suscitado la exclusión del concurso del documental sobre la historia de Tortora (conocido periodista y personaje televisivo italiano de las décadas de los ’80)...-, el balance es más que positivo.
En primer lugar, por la participación de público: un gran éxito de espectadores, con un crecimiento considerable en comparación con temporadas anteriores. Y, sobre todo, por la importante participación de profesionales provenientes de 31 países para un total de 71 películas seleccionadas entre más de 2000, 11 mediometrajes y 19 cortometrajes, dando preferencia y prioridad a las películas de autor respecto al cine de tipo 'mainstream', con trabajos independientes y de alto contenido y realización cinematográfica que hacen auspiciar un buen futuro para esta quermés.