Estreno exclusivo de la plataforma Disney+ en la que esta pareja de ardillas animadas dan el salto al formato cinematográfico tomando como referencia la serie de televisión que protagonizaron entre 1989 y 1990. Se suman así a la fiebre nostálgica que lleva invadiendo tanto la cartelera de los cines como las pantallas de televisión (o dispositivos tecnológicos varios) durante más tiempo del que podamos recordar. Los responsables de la misma, los guionistas Dan Gregor y Doug Mand así como su director Akiva Schaffer, optan por hacer un film de aventuras familiar que mezcla imagen real y animación (parece volverse a poner de moda con las recientes Tom y Jerry y Space Jam: Nuevas leyendas, ambas estrenadas el pasado 2021), algo que Disney allá por la década de los 70 hizo de manera novedosa en cintas como La bruja novata, de 1971, y Pedro y el dragón Elliot, de 1977, o en 'clásicos' algo más actuales de Warner Bros como Space Jam, de 1996, y Looney Tunes: De vuelta a la acción, de 2003, así como ¿Quién engañó a Roger Rabbit?, de 1988, producción de Amblin Entertainment y Touchtone Pictures (propiedad de Disney y actualmente desaparecida).
Con ésta última sí que se le pueden encontrar ciertos paralelismos, puesto que ahonda en temas comunes, como tener una trama detectivesca ambientada en Hollywood, en la cinta que nos ocupa el actual. Una suerte de 'buddy movie' con toques de comedia negra y algo de misterio que posee un ritmo narrativo muy ágil. En los primeros compases de la cinta ponen en situación al espectador, presentando a Chip y Chop como dos personajes de animación que son viejas glorias del espectáculo, lo que amplía el campo de crítica hacia la industria cinematográfica, éxito y fracaso dos caras de la misma moneda y que desprende cinismo hacia la nostalgia exacerbada, arremetiendo contra la falta de originalidad imperante en Hollywood a muchos niveles, por ejemplo las sagas cinematográficas interminables, los 'remakes' o los 'reboots'.
La trama principal de la cinta, la búsqueda de uno de los compañeros desaparecido de los protagonistas, es presentada como una aventura muy divertida que mezcla muy bien el tono familiar con toques de humor adulto. La nostalgia y la auto-parodia están equilibradas perfectamente, respeta el material original rindiéndole tributo pero, al mismo tiempo, pudiendo reinventar personajes para ofrecer alguna que otra sorpresa al espectador. En el apartado de animación, en la que tiene cabida tanto la tradicional en 2D como el 3D, la captura de movimiento y 'stop-motion', la cinta posee niveles visuales geniales que imprimen la fuerza necesaria tanto a los momentos más emotivos como a los gags más desternillantes y divertidos. Chip y Chop: Los guardianes rescatadores es una aventura con alma, entretenida, que sabe reírse de sí misma sin dejar de ser entrañable, con una pareja protagonista que se complementa a la perfección y que cuenta con un gran número de cameos de personajes de distintos estudios, como pasó en ¿Quién engañó a Roger Rabbit? a un nivel superior (Paramount, Universal, Dreamworks, Sony) muy bien integrados en la historia que harán las delicias del respetable.