Mateo Gil, el creador y codirector de esta serie, es el responsable de un cortometraje antológico que le dio a conocer al mundo del cine en 1998 y cuyo título es Allanamiento de morada, interpretado por Eduardo Noriega, Pepón Nieto y Petra Martínez. Más tarde dirigió, con el mismo protagonista, el estimable thriller sevillano, en mitad de la Semana Santa, Nadie conoce a nadie y Blackthorn, un notable western crepuscular interpretado por el mismo actor cántabro, además de por el actor, escritor y dramaturgo norteamericano Sam Shepard. Recientemente Netflix ha incorporado a su catálogo esta miniserie de seis capítulos, convirtiéndola en el número 1 en España por delante de series tan exitosas como The crown, sobre la realeza británica, y Gambito de dama, sobre el ajedrez. Los favoritos de Midas es la adaptación de un pequeño relato que Jack London escribió en 1901 bajo el título The minions of Midas.
Jack London es muy conocido por sus novelas de aventuras como Colmillo Blanco, La llamada de lo salvaje o El lobo de mar. A pesar de su prematuro fallecimiento, a la edad de 40 años, tiene una extensa producción de novelas y publicó un enorme número de relatos y sobre uno de ellos se basa esta serie. Los favoritos de Midas es un cuento moral que se centra en el personaje de Víctor Genovés, un empresario millonario al que una organización desconocida le plantea el precio que, para él, tiene la vida de un desconocido. Para ello le pide una enorme cantidad de dinero, que no le arruina ni mucho menos, por no matar a un desconocido cada semana. Al empresario, que tiene un cierto posicionamiento social y filantrópico, se le suscita la duda de ceder al chantaje para salvas la vida de personas que desconoce totalmente.
Este planteamiento, que es la base del relato de London, es ciertamente interesante, pero el relato, por su poca longitud, no tiene ramificaciones argumentales que incorpora el guión de la serie, como la investigación policial, la situación familiar o la relación erótico sentimental del empresario con una ambiciosa periodista. El ritmo es trepidante desde el principio, aunque algunos giros argumentales están forzados buscando el efectismo pero perdiendo en credibilidad. Cuenta con buenos trabajos en los intérpretes principales, como el incuestionable Luis Tosar; la periodista interpretada con acierto e indudable química con Tosar, Marta Belmonte; y el magnífico actor reencontrado en esta serie, Guillermo Toledo, como inspector de policía, tras dejar atrás problemas personales y de haber sido absuelto recientemente de la acusación de un delito contra los sentimientos religiosos, delito cuya sola existencia parece incompresible en un país democrático como España y más propios de regímenes integristas totalitarios.
En papeles de menos relevancia nos encontramos a Carlos Blanco (Fariña), Marta Milans (El embarcadero), Miguel Ángel Sola (Fausto 5.0), Ana Gracia (HIT) o Elena Irureta (Patria), ésta última demostrando su sobrada calidad en un papel prescindible en la trama. Los favoritos de Midas se ve con agrado porque tiene suficientes elementos de interés como para querer ver el siguiente capítulo, pero no tiene la profundidad moral que sí tenía la película mencionada, Fausto 5.0, dirigida por La fura dels baus en 2001, y además resulta necesario admitir 'pulpo como animal de compañía' en varias ocasiones para no cuestionar ciertas premisas poco creíbles que plantea el guión con una construcción poco refinada en algunos momentos. La música incidental de la serie está a cargo del compositor de moda en el panorama nacional, Lucas Vidal.