Un actor, Carmelo Gómez, que interpreta a Samuel. Una actriz, Ana Torrent, que interpreta a Silvia. ¿Uno, dos, tres personajes sobre el escenario? No queda claro. Samuel es un hombre sencillo, bueno, apegado a la tierra, a sus flores y plantas. Silvia es una mujer sofisticada y herida por un terrible pasado.
En la América, donde enormes superficies están ocupadas por casas unifamiliares idénticas las unas a las otras, emerge un jardín que es único y diferente a todo lo demás, lugar donde se desarrolla una historia del entrelazado humano de dos personajes remotamente próximos pero cercanos en sus enormes diferencias.
Las influencias tanto de Tennesse Williams como de Harold Pinter se evidencian en la maestría con la que estos dos magníficos intérpretes saben transmitir un torrente de sentimientos, emociones y complejidades humanas al patio de butacas a partir del texto de Alberto Conejero en Todas las noches de un día.