Pixar demuestra continuamente que los productos audiovisuales que tienen como destino personas menores de edad no tienen porqué ser de mala calidad, pero la tendencia habitual es que sean productos esquemáticos y muy sencillos para su fácil comprensión, algo totalmente equivocado ya que estas personas son de baja estatura pero de alta comprensión y racionalización, como puede atestiguar cualquier adulto que comparte tiempo con ellos.
Los futbolísimos, de Miguel Ángel Lamata -director de títulos como Nuestros amantes, Isi/Disi:Alto Voltaje o Una de zombis, esquemáticos y sencillos a más no poder-, sigue la senda prevista: planteamiento nada complejo de un grupo de jóvenes unidos por su pertenencia a un club de fútbol con una ligera trama de intriga y con las pulsiones pre-púber propias de la edad, tres condimentos atrayentes para el público al que va dirigido. Además, la cinta da comienzo con una secuencia que sabemos que va a ser con la que se termine y cómo va a terminar la película.
Utiliza la fórmula, vista recientemente (y con mucho éxito) en Campeones, de Javier Fesser, de actores naturales -en este caso niños y niñas- con profesionales de la interpretación como Toni Acosta, Carmen Ruiz, Norma Ruiz o William Miller, y un showman, porque actor no se le puede considerar aún, como Joaquín Reyes.
Lo básico del planteamiento, las interpretaciones planas y estereotipadas, o en exceso naturales de los personajes jóvenes, no auguran nada bueno, pero, mediado el metraje -ya sea porque el espectador ha asimilado los códigos de comunicación de la película o porque el ritmo y la progresión de la historia se hace más ágil-, el interés aumenta, llegando al final en los límites de una dignidad argumental que no se preveía al inicio de la cinta.
Mención aparte merece la breve (y muy divertida) secuencia de –el pito de oro- (sólo para adultos), que no voy a desvelar aquí por razones obvias, así que el espectador tendrá que acudir a la sala de cine o esperar un breve plazo de tiempo a que la emita Antena 3, ya que Atresmedia es una de las productoras de la película.
Los futbolísimos se basa en una serie de novelas de fútbol e intriga de considerable éxito, escritas por Roberto Santiago, también guionista, caso de El penalti más largo del mundo, nominado a Goya y director del cortometraje Ruleta. También hace su aparición en la película en un pequeño personaje metido con calzador.