Después de una primera puesta en escena este pasado fin de semana, el próximo domingo, 5 de febrero, Entrecajas Fusión representará, a las 19:00 horas en Espacio Espiral, Sueños del Mar Negro, espectáculo basado en dos piezas cortas emblemáticas en un acto de Anton Chejov: El oso y La proposición, ambas escritas por el dramaturgo ruso en 1888 en tiempos de buscar la igualdad femenina. La ironía da ligereza a la narración, a lo que suma situaciones absurdas, patéticas y poéticas a partes iguales.
El oso cuenta la historia de Yelena Pópova, una mujer que enviudó siete meses atrás del inicio de la trama. A partir de entonces juró guardarle luto hasta el fin de sus día a su amado esposo. La mujer decide encerrarse en su casa en compañía de Luká, su fiel criado, quien intenta hacerla entrar en razón para que continúe con su vida. Pero el encierro es interrumpido por Grigori Smirnov, un teniente de artillería retirado, quien llega a la casa para cobrar un dinero que le debía el difunto esposo. Entre la negativa de Yelena Pópova por pagar y las acaloradas discusiones con el cobrador que se niega a irse de la casa, surge un amor no confeso que se definirá en un duelo.
En La proposición, Iván Vasílievich Lómov, un terrateniente ruso, solterón e hipocondríaco, se presenta en la hacienda de su vecino, el terrateniente Stepán Stepánovich Chuvukov, con la intención de pedir la mano de su hija, la joven Natalia Stepánovna, después de vivir toda una vida como vecinos. Pero la petición de mano se frustra al caer la conversación en una discusión sobre las propiedades de unas tierras, para luego discutir sobre cual de sus respectivos perros de caza es mejor. Iván Vasílievich sufre un colapso durante la discusión, y padre e hija temen que haya muerto. Sin embargo, poco después, recupera la conciencia y Chuvukov obliga a la pareja a aceptar la propuesta de matrimonio.