La importancia y el potencial del séptimo arte como herramienta didáctica, presente ya en las aulas de un tiempo a esta parte, aún no ha alcanzado su máxima expresión, aunque, sin duda, cada vez son más las voces y los proyectos que contribuyen a una mayor presencia en las mismas y a mejorar las experiencias de su utilización como elemento complementario de los contenidos reglados. "Películas para la educación: aprender viendo cine, aprender a ver cine" (Cátedra) es un libro para profesores de ESO, bachillerato... pero también un vehículo instructivo con posibilidades de uso en el entorno educacional familiar.
La pretensión de este libro es la de ofrecer a formadores, docentes y padres un manual acorde con los desarrollos curriculares previstos en los últimos años de la educación secundaria obligatoria, el bachillerato y la formación profesional básica. Amistad y traición, civilización y barbarie, violencia y solidaridad, justicia y felicidad, libertad y seguridad, deber y corrupción, identidad y alteridad, sexo y amor, familia y escuela, son algunos de los temas sobre los que se invita a discutir a padres, educadores y alumnado.
De las relaciones personales de amor en "Antes del amanecer" al sexo de "Kids" pasando por la amistad en "El tercer hombre"; de la moral como norma en "El hombre que mató a Liberty Valance" a la justicia de "Matar a un ruiseñor" pasando por la felicidad en "Delitos y faltas"; de la política como abuso de poder o corrupción en "Lincoln" al terrorismo y las contiendas bélicas de "La noche más oscura" pasando por el totalitarismo en "Good bye, Lenin"; de la socialización familiar con "Familia" a la educativa en "El club de los poetas muertos" pasando por la comunicativa de "La red social"...
A lo largo de más de 400 páginas, los autores de "Películas para la educación: aprender viendo cine, aprender a ver cine", Carmen Arocena e Iñigo Marzábal -autores con experiencia cinematográfica, por ejemplo, con biografías respectivas sobre Víctor Erice y Win Wenders-, plantean unas actividades abiertas, orientadas al debate y a opinión, y otras cerradas, encaminadas a cuestiones puramente cinematográficas, recurriendo a más de 40 títulos divididos en 7 bloques temáticos: relaciones personales, socialización, moral, derechos humanos, política, vida biológica y posmodernidad.
Al objetivo más evidente de ofrecer un manual de apoyo susceptible de ser utilizado en estas etapas formativas, se puede añadir lo que podríamos denominar una 'pedagogía de la mirada'. En un mundo saturado de imágenes, poner a disposición del lector casi medio centenar de ejercicios de análisis concretos contribuirá a desarrollar una mirada más aguda y competente, más consciente de la manipulación que subyace a todo discurso. No sólo se trata de establecer lo que una película dice, sino también determinar cómo dice lo que dice. De ahí la doble aspiración última del libro: aprender viendo cine, aprender a ver cine.