La Machina Teatro, compañía en convenio con la Universidad de Cantabria y apoyada por la Consejería de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Cantabria y el INAEM del Ministerio de Cultura, pondrá en escena hoy jueves, 12 de Febrero, "Soliloquio de un fusilado goyesco", un espectáculo programado a las 19:30 h. en el Museo de Arte Moderno y Contemporáneo de Santander y Cantabria (MAS), con entrada gratuita, que servirá, además, de clausura a los actos organizados por este centro con motivo del Bicentenario (1814-2014) del encargo del retrato de Fernando VII a Francisco de Goya.
Este monólogo, escrito por Luis Oyarbide y Francisco Valcarce, está protagonizado por un personaje del célebre cuadro "Los fusilamientos del 3 de mayo" o "Los fusilamientos en la montaña del Príncipe Pío", interpretado por el propio Oyarbide y dirigido por el propio Valcarce. El hombre con la camisa blanca y los brazos en cruz cobra vida para compartir experiencias con el público del siglo XXI. El actor interpreta tres papeles -el personaje del cuadro, el criado de Goya y el propio pintor-, a través de los cuales se pondrá de manifiesto el origen del extraordinario realismo y de la profunda sinceridad de esa pintura.
La compañía teatral relatará cómo observó el artista los cruentos episodios que se representan en el cuadro y cómo tomó apuntes la misma noche en que acontecieron los hechos, pero también se mostrarán las consideraciones que llevaron al maestro a la producción y posterior edición de "Los Caprichos" (una muestra de ellos se hayan expuestos en la primera planta del MAS). Asimismo, el personaje aludirá al cuadro que forma parte de la colección del museo, el retrato del monarca Fernando VII que pintó Goya en 1814.
Se trata de una alegoría de la España constitucional en oposición a la España absolutista impuesta por el rey, que se tradujo en el aplastamiento del régimen liberal. En ese momento, se dieron sucesos como la abolición de la Constitución de 1812, la derogación de todos los decretos de las Cortes, la re-instauración de la Inquisición o la desaparición de la libertad de imprenta. El trabajo interpretativo, protagonista del espectáculo, se complementa con un montaje musical formado por piezas de compositores contemporáneos de Goya, como Schubert, Haydn y Beethoven.