Un año más, y ya son 14 ediciones, Torrelavega desplegó la alfombra roja para que cineastas y autoridades, y algún que otro famoso, se lucieran en su recorrido. Sin embargo, se puso a llover... ¡y mi gozo en un pozo (más bien charcos de agua)!. Con un Teatro Municipal Concha Espina lleno hasta la bandera, y que aplaudió a cada premiado con reconocimiento y gratitud, hubo premios para todos...
... Y, sobre todo, con importantes remuneraciones económicas, circunstancia que, con los tiempos que corren, es una alegría aún mayor para los afortunados, factor que les permitirá, seguramente, seguir haciendo lo que más les gusta: cortometrajes y cine. Una edición con más de 1.500 trabajos recibidos, dato objetivo que dice mucho de la buena salud que tiene el cortometraje a nivel cántabro, nacional e internacional.