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Crítica: "Viejos", por Paco España

Filmin ha estrenado Viejos, propuesta de género fantástico de cine patrio. Son muchos los títulos importantes de la cinematografía española de este género, desde las películas de Jacinto Molina (Paul Naschy) o Jesús Franco hasta las más recientes de Jaume Balagueró, aunque, sin ir demasiado lejos, los dos mismos directores de esta película, Raúl Cerezo y Fernando González Gómez, son los responsables de otra propuesta de este género titulada La pasajera, con una calidad muy escasa. Viejos nos introduce en Madrid, una ciudad reconocible pero extrañamente inquietante, durante una canícula que acerca las temperaturas a los 50 grados, algo de gran actualidad por las altísimas temperaturas que ha tenido la península ibérica en el mes de abril y que han superado todos los récords históricos.


Una anciana se arroja por el balcón de su casa, por lo que su hijo y la familia de éste tienen que hacerse cargo del abuelo viudo, llevándole a su casa, lo que genera una situación de gran inquietud, especialmente con su nuera, aunque con su nieta parece tener un entendimiento mayor que con cualquier otro miembro de la familia. Viejos es una película curiosa, que mezcla situaciones argumentales y visuales de títulos tan variados como El resplandor, la saga española REC, el cine de M. Night Shyamalan en propuestas como Señales y La visita, o, incluso, algún aspecto de Videodrome, de David Cronenberg. Parece imposible construir un argumento mínimamente coherente con semejante remix de influencias cinematográficas, pero lo logran y crean un argumento con cierta coherencia dramática que va creciendo, como no puede ser de otra manera en este género fantástico, con varios giros argumentales sorprendentes que funcionan.


A ello colaboran los intérpretes con su calidad: Zorion Eguileor, al que ya vimos desenvolverse perfectamente en este género en El hoyo; y Gustavo Salmerón, un actor con mucho talento al que vimos dirigiendo Muchos hijos, un mono y un castillo, sobre su indescriptible progenitora, además de su trabajo interpretativo en Fuera del cuerpo, de Vicente Peñarrocha, o en Little Galicia, de Alber Ponte, con trabajos en cortometrajes muy interesantes, al igual que su compañera de reparto, la estupenda Irene Anula (Lucas, Asamblea). Participa, igualmente, la joven actriz Paula Gallego, a la que vimos crecer, desde la niñez, como la hija pequeña de la familia Alcántara en la serie Cuéntame, hasta que fue sustituida. Esta actriz ya apareció en la anteriormente citada de estos directores La pasajera. Viejos puede resultar interesante para los amantes del género, porque tiene suficientes aciertos argumentales e interpretativos para ello.