No es la primera vez que escribo sobre una película de Alejandro Amenábar. En esta ocasión hablaré sobre Tesis, su primer largometraje, escrito y dirigido por él mismo en cooperación con Mateo Gil. La película nos presenta al principio a Ángela, protagonizada por Ana Torrent, quien estudia Imagen y Sonido en la Universidad Complutense de Madrid. Ángela está a punto de graduarse, por lo tanto está preparando su tesis doctoral. El tema escogido es la presencia de la violencia dentro del mundo audiovisual, y, para documentarse, decide hacer una recolección de películas clasificadas como 'snuff', un cine de terror centrado en la violencia gráfica y lo visceral. Para obtener más información al respecto, y entender más todo sobre este tipo de cine, decide acercarse a un chico de su universidad llamado Chema, con quien forma una interesante amistad.
Ángela obtiene ayuda, además, de un profesor de su universidad, quien se compromete a conseguir películas relacionadas con el tema en la videoteca de la institución. La historia se torna oscura a medida que avanza, pues el maestro de Ángela aparece muerto mientras veía un vídeo gráfico de una chica de la universidad siendo torturada. Con el desarrollo del metraje aparece un personaje clave, el principal sospechoso, Bosco Herranz, protagonizado por Eduardo Noriega. Para no seguir haciendo spoilers de una película que merece la pena ver, me limito a anunciar que, a partir de esto, los días siguientes para Chema y Ángela giran alrededor de un solo objetivo, encontrar al autor de aquella aberrante grabación. Los diferentes personajes de la película están construidos a través del punto de vista de los principales prejuicios de la sociedad. Tenemos en la película una chica bien y 'adaptada' socialmente. Luego, por el otro polo, tenemos al chico incomprendido, freak, con gustos fuera de lo común y socialmente inadaptado. Finalmente tenemos al mujeriego, seductor y de clase alta, el conocido como 'pijo' en España. De esta manera, el director se encarga de que, por medio de los prejuicios sociales, el espectador se forme su opinión sobre cada uno de los personajes. Es interesante la evolución de la historia. En un principio, el tema de la violencia en las películas, y todo esto del cine sangriento y de terror, era solamente algo relacionado con el trabajo final de Ángela. Sin embargo, termina consumiendo su vida entera. El día a día de la personaje principal se convierte en una película de terror y suspense.
Tesis es una película que, a pesar de ser rodada con un presupuesto limitado, logra tener éxito por la excelente dirección de Amenábar, a pesar de ser 'novato' en esa época. La trama se desarrolla con una destreza interesante y movimientos de cámara que hacen su trabajo de manera exitosa, contextualizando al espectador. El director logra meternos en la piel de personajes específicos y hacernos sentir empatía hacia personajes que normalmente no lo haríamos. Otro aspecto que llama mi atención de Tesis es como en muy pocos momentos se nos muestra real tortura o escenas sanguinarias. Por medio del sonido y de los gestos de los personajes el espectador hace uso de su imaginación y crea en su cabeza las escenas no vistas. Eso es algo que no se logra fácilmente. No es ningún misterio el gran éxito que obtuvo tanto por parte de críticos como por el público.