El cineasta francés Patrice Chéreau firma esta semana, del 12 al 16 de Agosto en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, una nueva entrega del ciclo "El autor y su obra". Bajo el epígrafe de "La narración y el cuerpo del actor", esta cita docente cuenta con un inusual formato de debate con el periodista y secretario del curso, Vincent Huguet. Así ha definido el realizador de cine, teatro y ópera su nuevo 'reto'. Con 68 años, por primera vez, Chéreau se enfrenta como profesor a un auditorio ávido de empaparse de los conocimientos de un profesional con más de medio siglo de vinculación a la escena.
Admirador confeso de Buñuel, Chéreau prefiere 'las narraciones fuertes, las que permiten tener una verdadera visión de la realidad a las de la Nouvelle Vague, que son mucho más difusas'. Hijo de artistas (su padre y su madre fueron pintores), el polifacético director admite que empezó en el teatro 'buscando situaciones excepcionales que simplemente produjesen imágenes'. Pero la experiencia es un grado y, por eso, ahora defiende que las razones por las que se cuenta una historia, son 'tan importantes como el qué narrar o de qué manera hacerlo'. Así, el 'metteur en scène' define su oficio como 'contador de historias con actores'. Pero no solo eso: 'Tengo la ambición de, con mis obras, colocar un espejo donde las personas puedan mirarse. Siempre reflexiono sobre la imagen del mundo que estoy dando. No se trata de hacer una colección de fotogramas, sino de dibujar un recorrido. Un trayecto que construya una narración', matiza. Además, este recorrido tiene que ser 'limpio y claro'. Las historias, aclara, hay que contarlas con un filtro personal, pero como si el espectador no supiera nada de ellas, 'aunque se trate de Hamlet'.
Y lo sabe de buena tinta, pues no solamente se ha encargado de dirigir esta obra de Shakespeare en el teatro, sino que también se ha puesto al frente de "Ricardo III", o "Fedra": 'Puedes hacer una de las mil versiones posibles de una obra, pero tienes que conseguir que el público la mastique y la digiera. Esa es la prueba de fuego: que el espectador lo entienda'. Para ello, Patrice Chéreau no olvida el importante papel que tienen los actores, 'no solo como soporte de las historias, sino que aportan una segunda narración que hay que combinar con la del director. Por eso, tenemos que ser permeables'. Este curso se combina con un ciclo de su cinematografía en la Filmoteca de Cantabria. Puedes consultar AQUI toda la información sobre este ciclo.