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La Fiesta del Cine... o no saber captar al espectador, por Paco Ibáñez

Cada año por estas fechas, las más flojas en lo que asistencia de público a las salas de cine se refiere, se organiza, por cuarta edición consecutiva, la Fiesta del Cine. Desconociendo la lumbrera que ha diseñado la campaña de este año, el objetivo aparente de atraer al posible espectador reticente ha tenido un efecto totalmente contrario. ¡Peor no se ha podido hacer!. Pero vayamos por partes. Durante los 15 días previos a la celebración de la Fiesta del Cine, cuando un espectador asistió al cine para ver una película, en la taquilla le entregaron una acreditación para que los días 22, 23 y 24 de Octubre se beneficiase de la susodicha promoción por la módica cantidad de dos euros. El espectador guardaba en su bolsillo la tarjeta, asistía a su película y se iba a casa.
Ya con calma, consultar la mencionada acreditación suponía encontrarse 'en letras grandes' con "Ven al espacio de cine de El Corte Inglés y en cada película que compres te haremos (debajo y 'en letras aún más grandes') dos euros de descuento". El creador de la campaña, por su parte, no se detenía en su intento por conseguir que su promoción, en tiempos de crisis, le resultase atractiva al posible espectador... y cada vez era todo más confuso. El Corte Inglés, literalmente, 'ocupó' con todo el espacio restante de la acreditación promocional: descuento de dos euros en cada DVD o Blu-Ray, que si lo uno, que si lo otro... hasta parecer que la Fiesta del Cine la organizaba El Corte Inglés. Como consecuencia del interés económico, y no de la supuesta invitación al posible nuevo espectador, que se encuentra tras esta campaña de marketing, tanto Cinesa Bahía de Santander como Peñacastillo 3D Cinemas 12, multisalas cántabras participantes de la misma, han visto como las asistencias de público a los cines de la región durante los días de la promoción han sido los normales en el mes de Octubre... normales, tirando a flojas.
Exhibidores, distribuidores... no se han sacrificado. Por poner un ejemplo: las películas en 3D o los títulos de distribuidoras como Warner no entraban en la promoción (o simplemente demuestran que su afán mercantilista va tan allá que les da lo mismo tirar piedras contra su propio tejado para luego clamar llantos de sirena). Frecuente ha sido, durante las jornadas de la 'fiesta en cuestión, encontrarse la siguiente situación en las taquillas: una persona sacando su entrada a dos euros enseñando su acreditación e, inmediatamente antes o después, otra persona pagando su precio normal por no contar con la papeleta en cuestión. ¡Por la Fiesta del Cine a dos euros simplemente por 'ir al cine'!. Resumiendo, la Fiesta del Cine en Santander no ha conseguido su presunto propósito: hacer que el bolsillo del espectador se beneficiase de ir al cine a disfrutar de su película favorita gracias a una campaña publicitaria orquestada, engañosa y confusa.