Fechado ayer viernes, 20 de Enero, El Diario Montañés incluye en este enlace de su web un reportaje titulado "La última vez que pisé un cine". Si bien es cierto que por nuestro cometido somos asiduos espectadores de las salas de cine, las respuestas de los encuestados a pie de calle no justifican, creemos, el subtítulo de ese mismo video: "Los ciudadanos de la capital cántabra echan en falta cines en la ciudad".
La mayoría de las personas que responden a la pregunta de referencia, lógicamente, confirman algo más que evidente: la gente no va al cine con la regularidad que seguramente desearía -algo que seguramente ocurriría si les preguntásemos por conciertos, teatro, conferencias..-. No obstante, y a pesar de las curiosas respuestas de personas que señalan que hace 40 años que no visitan un cine, vincular esta circunstancia a la inexistencia de salas en Santander supone un atrevimiento excesivo, teniendo en cuenta la presencia en el corazón mismo de la ciudad, ¿qué opinarán los propietarios y gestores de este resbalón?, de tres cines: Groucho, Los Angeles y Filmoteca Regional.
Si bien es entendible una posible crítica ante la posibilidad única de ver cine comercial de estreno en los centros comerciales de las afueras, cada uno de los mencionados cumple con un cometido diferente ofreciendo alternativas de interés, y a un precio más asequible: Cines Groucho rescata del olvido estrenos menos comerciales de indudable calidad, Cine Los Angeles acerca al centro de la ciudad las películas de estreno (normalmente con un retraso inevitable de pocas semanas o, en algunos casos, incluso en la misma fecha de estreno comercial), y la Filmoteca Regional propone una programación de clásicos incuestionables.
Por tanto, oferta cinematográfica en Santander hay, otra cosa es que agrade nuestros deseos con las limitaciones de las cuatro salas de las que estamos hablando. Finalmente, ahora que internet parece haberse convertido en un 'coto de caza de ida y vuelta', no se puede obviar tampoco que la demanda de cine ha experimentado cambios significativos en los últimos tiempos en lo que a formatos y soportes se refiere. Así pues, simplificando que es gerundio.
Si bien es entendible una posible crítica ante la posibilidad única de ver cine comercial de estreno en los centros comerciales de las afueras, cada uno de los mencionados cumple con un cometido diferente ofreciendo alternativas de interés, y a un precio más asequible: Cines Groucho rescata del olvido estrenos menos comerciales de indudable calidad, Cine Los Angeles acerca al centro de la ciudad las películas de estreno (normalmente con un retraso inevitable de pocas semanas o, en algunos casos, incluso en la misma fecha de estreno comercial), y la Filmoteca Regional propone una programación de clásicos incuestionables.
Por tanto, oferta cinematográfica en Santander hay, otra cosa es que agrade nuestros deseos con las limitaciones de las cuatro salas de las que estamos hablando. Finalmente, ahora que internet parece haberse convertido en un 'coto de caza de ida y vuelta', no se puede obviar tampoco que la demanda de cine ha experimentado cambios significativos en los últimos tiempos en lo que a formatos y soportes se refiere. Así pues, simplificando que es gerundio.